Documentar la variabilidad de la práctica clínica, analizar sus causas y adoptar estrategias orientadas a eliminarla, han demostrado ser iniciativas que fomentan la toma de decisiones efectivas y seguras, centradas en los pacientes, por parte de los profesionales sanitarios. Entre dichas estrategias destaca la elaboración de Guías de Práctica Clínica (GPC), «conjunto de recomendaciones basadas en una revisión sistemática de la evidencia y en la evaluación de los riesgos y beneficios de las diferentes alternativas, con el objetivo de optimizar la atención sanitaria a los pacientes».
Entre las prioridades del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, se encuentra consolidar la elaboración de GPC, coordinada desde GuíaSalud, en el marco de la Red Española de Agencias de Evaluación de Tecnologías Sanitarias y Prestaciones del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Es en este contexto en el que se enmarca la presente Guía de Práctica Clínica sobre la Enfermedad Renal Crónica (ERC).
La ERC se define como un conjunto de enfermedades heterogéneas que afectan la estructura y función renal con una gran variabilidad en su expresión clínica. La incidencia y la prevalencia global de la ERC están probablemente subestimadas debido al uso de diferentes clasificaciones a lo largo del tiempo y además existe una amplia variabilidad en estos datos debido a las medidas utilizadas y la propia variabilidad en las características socio-demográficas de las personas afectadas entre los diferentes países y regiones. En España se estima que la prevalencia global de ERC en estadios 3-5 es aproximadamente del 6,8% (3,3% para edades 40-64 años y del 21,4% para edades >64 años).
Debido a su compleja etiopatogenia y las interrelaciones con otras patologías y condiciones (particularmente con la enfermedad cardiovascular), es probable que la prevención mediante las intervenciones habituales en factores de riesgo sea menos eficaz y que sea necesario investigar en nuevas estrategias como, por ejemplo, la prevención precoz, el diseño de objetivos terapéuticos sobre factores no tradicionales o intervenciones multifactoriales.
Esta GPC sobre ERC responde a preguntas clínicas concernientes a su detección precoz, derivación a atención especializada y manejo, tanto mediante tratamiento farmacológico como con medidas higiénico dietéticas, estilos de vida e intervenciones educativas.
Se dirige, principalmente, a los profesionales implicados en la asistencia sanitaria de pacientes con ERC con el objetivo de dotarles de las herramientas apropiadas para su detección y manejo, así como de facilitarles la coordinación entre el ámbito de Atención Primaria y Hospitalaria.
Esta guía es el resultado del gran esfuerzo realizado por un grupo de profesionales sanitarios pertenecientes a distintas especialidades y representantes de varias Sociedades Científicas implicadas en este problema de salud.
Desde la Dirección General de Salud Pública, Calidad e Innovación agradecemos a todas estas personas el trabajo realizado y esperamos que pueda ayudar a profesionales y pacientes en la toma de decisiones, mejorando la adecuación de los tratamientos y la calidad de vida de la población afectada.
ELENA ANDRADAS ARAGONÉS
Directora General de Salud Pública,
Calidad e Innovación