El suicidio representa un grave problema de salud pública. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, en el año 2018 se produjeron 3.539 muertes por suicidio en nuestro país. Además de su importancia desde el punto de vista epidemiológico, las implicaciones de la conducta suicida son devastadoras para los propios pacientes y sus familias, que se ven profundamente afectadas a nivel emocional, social y económico.

Es por ello de gran importancia la adopción de medidas y el desarrollo de estrategias encaminadas a la disminución y prevención de la conducta suicida, entre ellas la elaboración e implementación de guías de práctica clínica.

La Guía de Práctica Clínica de Prevención y Tratamiento de la Conducta Suicida  se publicó en 2012, formando parte del Programa de Guías en el SNS.

El tiempo transcurrido desde su publicación, evidencia publicada y la prioridad del problema, hicieron relevante su revisión. Tras considerar la evidencia identificada y la valoración de los expertos de las principales sociedades científicas y asociaciones de pacientes, el grupo de revisión concluyó que no era necesario actualizar la guía en este momento.

Avalia-t ha elaborado un informe con el objetivo de documentar el procedimiento para la revisión de la GPC y los principales resultados y conclusiones del grupo de trabajo.

El objetivo de este trabajo era determinar si las recomendaciones de la GPC continúan vigentes y decidir si es necesaria la actualización de alguna de sus partes. Además de las recomendaciones, también se revisó la vigencia de otros contenidos clínicos relevantes como algoritmos diagnóstico-terapéuticos, información para pacientes, indicadores de calidad y recomendaciones de investigación futura.

 

El informe del procedimiento de revisión de la GPC se puede consultar en este enlace: https://bit.ly/2ZEyBJx