GuíaSalud ha publicado en su Catálogo la Guía de Práctica Clínica (GPC) para el Tratamiento del Trastorno de Ansiedad Generalizada en Atención Primaria desarrollada en el marco del Programa de GPC en el Sistema Nacional de Salud (SNS). El Servicio de Evaluación del Servicio Canario de la Salud (SESCS) ha sido el responsable de coordinar su elaboración.

Esta GPC para el tratamiento del Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG) en Atención Primaria actualiza parcialmente un documento previo de 2008 que abordaba el diagnóstico y tratamiento del TAG y el trastorno de angustia, con o sin agorafobia, incorporando los nuevos avances en el tratamiento del TAG.

Proporciona recomendaciones actualizadas, desarrolladas de forma sistemática y basadas en la mejor evidencia científica disponible, para ayudar a los profesionales implicados y a los pacientes a tomar decisiones sobre las opciones terapéuticas más adecuadas a la hora de abordar su problema de salud.

El objetivo de su elaboración es reducir la variabilidad en la práctica clínica, mejorar la coordinación con la atención especializada en salud mental y mejorar la calidad asistencial prestada a estos pacientes, esperando mejorar así su calidad de vida.

En el grupo de trabajo han participado especialistas en medicina de familia, psiquiatría, farmacología clínica, psicología, enfermería de AP, enfermería de salud mental, farmacia de AP, trabajo social, economía de la salud y metodología, y representantes de asociaciones de familiares y pacientes.

La GPC aborda la atención inicial de las personas con TAG que acuden a la consulta de AP, el tratamiento (farmacológico y no farmacológico) que puede ser utilizado en AP y los criterios de derivación a la atención especializada en salud mental. Además, se acompaña de una versión para pacientes, familiares y cuidadores.

Se dirige a profesionales de la salud implicados en el manejo de los pacientes con TAG y que trabajan en el ámbito de AP (medicina, enfermería, psicología, farmacia y trabajo social), a las personas que padecen TAG y que acuden a este primer nivel asistencial, a sus familiares y/o cuidadores, a colectivos educativos o sociedades científicas, así como a gestores sanitarios.

En este enlace se puede consultar la GPC y sus diferentes versiones.

El paciente ha de tener la opción de decidir acerca de su atención sanitaria, a partir de sus principios, valores y preferencias, y el profesional que le atiende debe promover esa toma de decisión con toda la información. Para eso, es clave que exista tiempo de calidad para dedicar a los pacientes.

Más de 250 profesionales sanitarios y representantes de asociaciones de pacientes han debatido sobre cómo facilitar que las decisiones se tomen de forma compartida. Lo han hecho en el marco de la jornada de GuíaSalud 2024, organizada por el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud (IACS), que ejerce la secretaría del organismo del mismo nombre -GuíaSalud- del Sistema Nacional de Salud (SNS).

La jornada se ha celebrado esta semana en la sede del Ministerio de Sanidad, en Madrid. Este evento científico ha sido inaugurado por la directora gerente del IACS, Elena Gonzalvo, y la subdirectora general de Calidad Asistencial del Ministerio de Sanidad, María Fernández.

La jornada científica, titulada ‘La Toma de Decisiones Compartida: Un enfoque científico hacia la toma de decisiones’, ha servido para poner sobre la mesa las distintas herramientas con las que cuentan actualmente los profesionales clínicos para involucrar a los pacientes en la toma de decisiones sobre su salud.

En esa línea, la técnico de área de Decisiones Basadas en la Evidencia del IACS, María José Vicente, ha presentado el Manual Metodológico, elaborado dentro de GuíaSalud para ayudar a la toma de decisiones, a la vez que ha puesto de manifiesto la necesidad de contar con un documento como éste, basado en la evidencia.

Las preferencias y valores de los pacientes son aún más importantes cuando existe incertidumbre, es decir, los beneficios y los riesgos de las diferentes opciones disponibles son similares. La experta en Estadística de la Universidad de Valencia, Anabel Forte, ha puesto el foco en analizar si ambas partes interpretan de la misma forma los riesgos de una intervención.

Por su parte, la representante del Departamento de Pediatría, Obstetricia, Ginecología y Medicina Preventiva de la Universidad Autónoma de Barcelona, Monserrat León-García, se ha referido a cómo desarrollar y evaluar el uso que se da a las herramientas ya existentes dentro de las consultas. Según León-García, “mejoran la calidad de la decisión y el proceso”, pero es necesario desarrollar más líneas para evaluar la calidad de las mismas.

CONTAR CON TIEMPO DE CALIDAD

Contar con tiempo de calidad para dedicar a los pacientes, más formación en la toma de decisiones compartidas y dar difusión a las herramientas existentes son tres de las claves que profesionales sanitarios y pacientes han identificado como la llave para potenciar la participación de los pacientes en todo aquello que esté vinculado a su salud. Esa ha sido la principal conclusión de la segunda de las mesas, centrada en cómo se está aplicando la toma de decisiones compartida en el entorno sanitario.

La coordinadora de atención y participación ciudadana del Hospital Vall d´Hebrón de Barcelona, Ana Martí, ha asegurado que cuando a los pacientes «les damos la oportunidad de opinar y decidir, siempre lo hacen”. Y, en esa línea, ha mostrado el modelo que han diseñado para hacerlo “más ágil, porque la incorporación del paciente a la toma de decisiones no puede retrasar un tratamiento, ni incrementar las listas de espera”.

La visión de los pacientes sobre si realmente se está implantando la toma de decisiones la ha presentado la paciente experta Mónica Suárez, quien ha insistido en que es necesario «que los profesionales nos dediquen más tiempo para que nos informen sobre el diagnóstico, los posibles tratamientos y los pros y contras de cada uno”. “Los pacientes necesitamos tener el tiempo para procesar la noticia, para analizar la información y, desde luego, necesitamos tiempo para poder decidir”, ha concluido.

En esa misma línea se ha expresado la médico de familia en Tenerife, Beatriz González de León, que ha enfatizado en la necesidad de contar con más formación y más tiempo de calidad para cada paciente. Pero, también, es importante fomentar que los profesionales sanitarios compartan con otros compañeros cómo involucrar al paciente en la toma de decisiones “porque aprendemos los unos de los otros”.

El punto de vista social lo ha aportado Paulina Bravo, de la Fundación Arturo López Pérez, que ha contado su experiencia en Chile sobre cómo el contexto en el que se mueven los ciudadanos influye directamente en sus decisiones sanitarias y lo ha ejemplificado en ámbitos comunes para todos, como son las campañas de vacunación. “El objetivo de la toma de decisiones compartidas no debe ser que la población se vacune, sino que los ciudadanos sean capaces de decidir si lo hacen o no, estando bien informados”.

SOBRE GUÍASALUD

El Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud ostenta la secretaría de GuíaSalud desde 2004. Es un organismo del Sistema Nacional de Salud (SNS) en el que participan las 17 Comunidades Autónomas y el Ministerio de Sanidad. Fue creado en el 2002 y adoptado en 2003 por el Consejo Interterritorial del SNS como instrumento para mejorar la calidad de la atención sanitaria.

Entre sus funciones se encuentra la de potenciar la elaboración y uso de guías de práctica clínica, recursos y otros productos basados en la evidencia científica para apoyar la toma de decisión de los profesionales y pacientes en el SNS e impulsar la creación de redes de colaboradores y cooperación entre entidades de toda España.